Al principio me parecía un capítulo fácil de seguir y entender, sobre todo por el formato de guión en el que estaba escrito, pero el final este ha sido uno de los capítulos que mas me ha costado seguir.
En este capítulo nos encontramos con Bloom visitando distintos lugares, y ante situaciones de lo mas disparatadas. Incluso hay ocasiones en las que el protagonista, que sigue manteniendo su nombre, deja de ser Bloom, y quizás todo se trate de una confabulación que ocurre dentro de un sueño. Además, hay varios cambios de escenas que ocurren sin premeditación ni sentido, ya que en medio de una conversación cambia todo.